Castilla-La Mancha lanza un nuevo impulso al empleo juvenil con la activación de una convocatoria de ayudas públicas que destinará más de 3 millones de euros a subvencionar la contratación de jóvenes de entre 18 y 29 años. El objetivo es facilitar el acceso a un primer empleo de calidad, con atención especial a colectivos vulnerables.
La medida, publicada por la Junta de Comunidades, está cofinanciada en un 85 % por el Fondo Social Europeo Plus (FSE+) y se enmarca en el Decreto 103/2022, dentro del programa operativo 2021-2027. Las ayudas podrán solicitarse hasta el 30 de octubre de 2025 a través de www.jccm.es, y cubrirán contratos formalizados entre el 1 de octubre de 2024 y el 30 de septiembre de 2025.
El diseño de la convocatoria contempla hasta cuatro modalidades de contrato subvencionable. Las mayores dotaciones presupuestarias irán destinadas a contratos de formación en alternancia, con 1.200.000 euros, seguidos por los contratos indefinidos o la transformación de temporales, que contarán con 1.000.010 euros. También se financiarán contratos de prácticas profesionales por valor de 812.880 euros y, en menor medida, contratos de relevo, que dispondrán de 34.100 euros. Según las previsiones del Gobierno regional, estas ayudas permitirán formalizar 165 contratos de formación, 98 de prácticas o relevo y 97 indefinidos, generando así un primer acceso laboral para 360 jóvenes de la región.
Posibilidad de quedarse
Pero el impacto va más allá del número de contratos firmados. Está previsto que 122 de los jóvenes contratados conserven el empleo una vez finalizada la subvención, y que al menos 47 accedan a un nuevo puesto gracias al impulso recibido. Además, un 20 % del presupuesto total se reserva para contrataciones en municipios afectados por emergencias de protección civil, lo que permite extender los beneficios de la medida a zonas especialmente golpeadas por incendios, inundaciones u otras catástrofes recientes.
Las ayudas están dirigidas a empresas y entidades que contraten jóvenes en situación de desempleo, con prioridad para personas con discapacidad, mujeres víctimas de violencia de género, jóvenes en riesgo de exclusión social y quienes estén inscritos en el Sistema Nacional de Garantía Juvenil. Este enfoque busca reducir el paro juvenil y corregir desigualdades estructurales de acceso al empleo.
José Miguel Peñas de Pablo, CEO del Grupo SRP, valora muy positivamente esta iniciativa: “Este tipo de medidas permiten a muchas pymes asumir el coste de incorporar personal joven con talento y motivación. Y lo hacen en condiciones estables, que ayudan a retener y formar recursos humanos estratégicos”. Se trata de una apuesta que también comparte el Grupo Peñas. “Aquí siempre hemos valorado la incorporación de talento joven que aporte frescura, nuevos puntos de vista e innovación a nuestra plantilla”.
Con una reserva del 30 % de crédito adicional por cada línea de ayudas en caso de alta demanda, la Junta de Comunidades confía en que el número de beneficiarios incluso pueda crecer si se activa el interés empresarial. Esta convocatoria podría convertirse así en una de las principales herramientas de reactivación juvenil y modernización del mercado laboral regional durante el ejercicio 2025.